¿Sabías que la pérdida de visión periférica puede darse de forma repentina? ¿Has oído decir que la visión en túnel puede estar asociada a alguna enfermedad degenerativa? ¿Te preocupa esta condición y te gustaría conocer más sobre sus causas y posibles soluciones? ¡Estás en el sitio correcto! La visión periférica localiza y reconoce información visual alrededor del objeto sobre el que fijamos nuestra atención, permitiéndonos interactuar con el entorno que nos rodea de forma adecuada y positiva.
Una buena visión periférica depende tanto de los 120 millones de células fotorreceptoras especializadas presentes en la retina, como del nervio óptico, encargado de transmitir la información visual al cerebro. El fallo de alguno de ellos puede provocar que se pierda la visión periférica de forma temporal o permanente dependiendo de cuál sea la causa del desajuste. A continuación, te explicamos en qué consiste la visión en túnel, sus causas y posibles soluciones.
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Qué es la visión en túnel o pérdida de visión periférica
Una buena visión periférica puede abarcar un ángulo de casi 180 grados. Cuando este ángulo de visión se reduce da lugar a lo que se conoce como visión en túnel, visión en escopeta o pérdida de visión periférica. Se trata de una condición visual en la que se experimenta una reducción del campo visual que puede ser tanto lateral como vertical, creando una sensación de limitación o restricción en la capacidad de ver objetos y detalles en los bordes del campo visual. Esto crea la ilusión de estar mirando a través de un tubo estrecho, de ahí el nombre de “visión en túnel”.
Puede ocurrir que la pérdida de visión periférica se dé en un solo ojo o en los dos a la vez. Aun así, puede que sólo sea perceptible cuando se cierra un ojo ya que el cerebro tiene la capacidad de compensar la falta de visión completando la imagen con lo que ve cada ojo. A menudo la pérdida de visión periférica se da de forma paulatina y es difícil darse cuenta a no ser que se realice una revisión ocular.
Causas de la visión en túnel o pérdida de visión periférica
Las causas de la visión en túnel o pérdida de visión periférica pueden ser variadas y están relacionadas con distintas condiciones médicas y factores. Esta condición visual puede ser resultado de daños o alteraciones en diferentes partes del sistema visual, incluyendo los ojos, el nervio óptico y el cerebro. A continuación, enumeraremos algunas de las causas principales que pueden dar lugar a la visión en túnel:
#1 Glaucoma
El glaucoma es considerado la segunda causa de ceguera de los países desarrollados después de la diabetes. Se trata de una lesión de las fibras del nervio óptico provocada generalmente por un aumento de la presión intraocular. Como sabes, el nervio óptico se encarga de transmitir las imágenes al cerebro y el aumento de la presión intraocular afecta lenta y progresivamente las fibras nerviosas que lo componen, causando una pérdida de visión a veces irreversible. Cuando se manifiesta la visión en túnel, el glaucoma ya ha alcanzado fases avanzadas.
#2 Accidente Cerebrovascular
Tras un ictus, es común que algunas personas experimenten visión de túnel que afecta a ambos ojos. Si has sufrido recientemente un ictus, es recomendable que evalúes tu visión periférica mediante una prueba de campo visual realizada por tu profesional de referencia. La buena noticia es que la mayoría de las personas suelen experimentar con el tiempo una recuperación parcial o total de la pérdida visual asociada al ictus.
#3 Migraña ocular
La migraña ocular se caracteriza por ser un tipo de dolor de cabeza que se localiza alrededor de los ojos o en un solo lado de la cabeza. Esta condición puede manifestarse con síntomas visuales, como la presencia de destellos de luz o la pérdida temporal de visión periférica. Dependiendo del caso, estos síntomas pueden afectar ambos ojos, conocido como aura migrañosa ocular, o solamente uno, denominado migraña retiniana.
#4 Retinosis Pigmentaria
La retinosis pigmentaria, también denominada retinitis pigmentosa, es una enfermedad genética que afecta a la retina. Se caracteriza por una pérdida gradual de fotorreceptores, que son las células especializadas de la retina responsables de la visión y en este caso, la pérdida de bastones (fotorreceptores de la retina periférica) resulta en la pérdida nocturna y periférica. Esta enfermedad degenerativa puede llevar a un deterioro progresivo de la visión, y en algunos casos, acaba provocando la ceguera total.
#5 Neuritis óptica
La neuritis óptica, una condición caracterizada por la inflamación del nervio óptico, puede dar lugar a una visión borrosa, gris, tenue y en túnel. La neuritis óptica puede resolverse por sí sola, aunque no se conoce con exactitud cuál puede ser su causa. Se cree que las infecciones virales pueden desencadenar una respuesta inmunológica en la que el sistema de defensa ataca al nervio óptico como si fuera un agente invasor. La pérdida de visión suele alcanzar su punto máximo en unos pocos días y comienza a mejorar en un plazo de 4 a 12 semanas.
#6 Desprendimiento De Retina
La retina es la capa de tejido que está situada en la parte interior del ojo y se encarga de percibir la luz y de llevar las imágenes hacia el cerebro. Cuando se sufre lo que se conoce como desprendimiento de retina, lo que ocurre es que esta capa de tejido se desplaza de su posición natural y deja de estar pegada a la pared ocular. Cuando esto ocurre aparecen síntomas como la aparición o aumento de manchas flotantes, visión central borrosa, sombras oscuras en los laterales del campo visual o pérdida de visión de forma repentina.
#7 Retinopatía Diabética
La retinopatía diabética es una enfermedad vascular causada principalmente por la diabetes. Si tienes diabetes del tipo 1 o 2, corres el riesgo de desarrollar retinopatía diabética. Esta enfermedad puede provocar graves problemas en la retina como atrofias maculares, cataratas o glaucomas. En las fases más avanzadas de la enfermedad, puede presentar síntomas como pérdida de visión periférica, manchas negras o incluso ceguera.
Posibles soluciones para la visión en túnel o pérdida de visión periférica
Lamentablemente, la visión en túnel no se soluciona con el uso de unas gafas o lentes de contacto convencionales que puedan corregir permanentemente la pérdida de visión periférica. Si bien es cierto que, en ciertos casos, se puede agregar un prisma a la prescripción de las gafas para ampliar el campo visual en algunas situaciones específicas de pérdida de visión periférica, esta opción no siempre es posible.
Así, por ejemplo, en el caso del glaucoma, la prevención es la mejor forma de evitar la visión en túnel. Para ello el paciente tendrá que seguir el tratamiento recetado, como el uso regular de gotas para los ojos que controle la presión ocular y evite el daño permanente del nervio óptico.
Si la visión en túnel ha sido provocada por daño cerebral, se recomienda recurrir a la terapia de la visión. Algunas técnicas específicas de terapia visual han demostrado ayudar a las personas a recuperar parte de la pérdida del campo visual relacionada con daños en la corteza visual primaria del cerebro.
Es importante tener en cuenta que cada caso de pérdida de visión periférica es único y requiere un enfoque individualizado. En este sentido, un profesional de la salud visual, como un óptico optometrista o un oftalmólogo, desempeña un papel fundamental. Consultar a un óptico especializado permitirá recibir un pre-diagnóstico preciso y un plan de actuación adecuado a la causa específica de la pérdida de visión periférica.
Cómo detectar la pérdida de visión periférica
Como sabes, la pérdida de visión periférica puede darse de forma paulatina por lo que puede pasar inadvertida hasta que ya es tarde. Por ese motivo es importante hacerse revisiones con cierta frecuencia ya que la detección de la pérdida de visión periférica puede realizarse a través de diversas pruebas. A continuación, mencionamos algunos de los métodos utilizados para detectar este tipo de pérdida visual:
- Examen de campo visual: Esta prueba evalúa la sensibilidad y alcance de la visión periférica. Se utilizan diferentes técnicas, como la perimetría automatizada, para determinar si hay áreas de pérdida o reducción de la visión en los bordes del campo visual.
- Respuesta del reflejo pupilar: El examen de los reflejos pupilares puede revelar anomalías en la respuesta de las pupilas a estímulos en diferentes condiciones lumínicas. Cualquier asimetría o reacción anormal puede indicar una pérdida de visión periférica.
- Pruebas de confrontación visual: Estas pruebas implican comparar la visión del paciente con la del examinador en diferentes posiciones del campo visual. Se utiliza para identificar la presencia de áreas ciegas o reducción en la visión periférica.
Cómo cuidar tu visión periférica
Cuidar de tu visión está en tu mano y realizar una serie de ejercicios visuales te puede ayudar a fortalecer y mejorar tus músculos oculares, a mantener la salud de tus ojos y cuidar tu agudeza visual. Con sencillos pasos como mover los ojos haciendo círculos, enfocar la vista a diferentes distancias o parpadear repetidamente se consigue relajar los ojos, reducir la fatiga visual y fortalecer los músculos oculares.
Para trabajar tu visión periférica, coloca un objeto delante de ti y, sin apartar la mirada de él, intenta localizar todo lo que hay al alrededor. También puedes realizar el ejercicio con otra persona y tratar de detectar los movimientos sutiles que realice. Para ello, debéis poneros una delante de la otra a una distancia de dos metros. La persona que hace el ejercicio debe mirar a la otra persona a la altura de la cabeza, pero enfocando más allá, como si mirase a través de ella. Esta otra persona debe realizar movimientos sutiles hasta que la primera los detecte mientras sigue mirando de forma relajada a la altura de la cabeza.
Conclusión: Evita que la visión en túnel o pérdida de visión periférica limite tu vida
La pérdida de visión periférica o visión en túnel puede cambiar la vida de una persona completamente ya que modifica su modo de interactuar con el entorno que le rodea. La visión periférica es la que nos permite subir y bajar escaleras sin tropezar y nos hace saber si un coche o una persona se acerca. Con la visión en túnel sólo ves exactamente donde miras y esto te resta mucha información. Es importante destacar que las causas de la visión en túnel pueden ser muy diferentes y van desde enfermedades oculares hasta problemas neurológicos.
Mantener un estilo de vida saludable, realizar exámenes oculares periódicos y seguir las recomendaciones de los profesionales de la salud visual pueden ayudar a detectar y tratar problemas visuales a tiempo, lo que puede prevenir o retrasar la aparición de la pérdida de visión periférica.
Si tienes alguna pregunta sabes que puedes contactar con Vita Óptica o venir a vernos si buscas una óptica de calidad en Valladolid ya que contamos con profesionales especializados que te pueden ayudar. Nuestra prioridad es tu salud visual, por eso, si lo que necesitas es una revisión de tus ojos, no dudes en reservar tu cita previa sin compromiso.